(Por una vez, no os recomendamos ni Yakuza ni Silent Hill)

Una sopa de langostinos, una pata de cordero. Colegas cancelando su asistencia en el último momento, la familia a la mesa. Miles de personas, desesperadas, vendiendo entradas para discotecas en Instagram. Quién sabe si también en Twitter, Facebook o Tik Tok. Ibai y Ramón García en la televisión; quién lo diría. Y uvas, muchas uvas. Concretamente, doce; quizás no fuesen tantas. Un momento con cierta relevancia vital y un acto muy representativo: pasar página, no solo a nivel personal, sino también como sociedad.

Cerrar 2021 ha sido un proceso largo y difícil, pero también muy necesario. Por circunstancias personales, no hemos sido pocos los que hemos anhelado durante meses una nueva excusa oportunidad para desprendernos de ciertos problemas personales sin echar la vista atrás. Tanto si os habéis visto en una situación similar como si habéis tenido el mejor año de vuestras vidas, hoy en HyperHype queremos mandaros fuerzas para este 2022, y de paso, recomendaros algunos títulos no necesariamente actuales con los que amenizar y disfrutar un poquito más los doce meses venideros. Ah, y gracias por leernos otro año más. Os queremos mucho.

Carlos Sánchez – Cyberpunk 2077

Tengo mil ganas de jugar Cyberpunk 2077, y es algo que digo espero decir completamente cuerdo y sobrio. A sabiendas de lo que me espera en mi viaje a Night City, estoy ansioso por transitar por sus calles y espacios, por ser cómplice de Johnny Silverhand y por conducir a máxima velocidad la moto más similar a la de Kaneda que encuentre. 2022 se antoja como un paradigma especialmente acertado para ello, pues en este mismo año deberían de lanzarse tanto la actualización para consolas next-gen como los primeros contenidos descargables y expansiones para la propuesta. Tras su estreno a finales de 2021, puede que Cyberpunk 2077 no hiciese las delicias de los fans del rol futurista, y puede que tampoco haya conseguido alcanzar tales cotas de calidad a lo largo de este año, pero como enamorado de la franquicia The Witcher y de otros trabajos del estudio polaco, sigo teniendo amplia fe en su buen hacer. Os pido, por tanto, darle una última oportunidad, especialmente ahora que el título puede encontrarse tanto en físico como en digital a menos de 15€. Y si finalmente no os convence y/u os quedáis con ganas de futurismo, siempre podréis acudir a 13 Sentinels: Aegis Rim. Al menos ahí hay mechas gigantes.

Abelardo González – Xbox Game Pass

Esto es como el que tiene 3 deseos y pide deseos infinitos. Si hay un concepto, idea o servicio que revolucionará 2022 será, y espero no equivocarme, Xbox Game Pass. La presentación del E3 2021 de la compañía de Redmond fue histórica porque confirmó que cada título propio estaría disponible de lanzamiento en el servicio. Y yo, como un fan acérrimo de ahorrar la mayor cantidad de dinero posible, llegué incluso a perder la noción del tiempo. Puede sonar exagerado, pero prometo que cuando terminó la conferencia no sabía en qué año vivía.

La secuela de S.T.A.L.K.E.R., Starfield y A Plague Tale: Requiem son solo unos pocos ejemplos de los megatones que la compañía pondrá en nuestra mano, y disculpadme que introduzca una referencia a Clint Eastwood, por un puñado de dólares. Con los deberes hechos y los árboles comenzando a florecer, 2022 apunta a ser el principio de la revolución de Xbox Game Pass. Aviso a otras compañías: tomad nota, los jugadores queremos mucho a nuestras carteras.

Jaime Llanos – Mundaun

De verdad quería recomendar Shin Megami Tensei V en este espacio, y quizás el mencionarlo aquí mismo sea mi forma tramposa de hacerlo de todas maneras. Pero no puedo dejar pasar la oportunidad de recomendar a todos, ya sean fans del terror o no, que le den una oportunidad a Mundaun. La obra de Hidden Fields nos presenta un pequeño pueblo en Suiza dibujado a lápiz, con cada momento cuidadosamente diseñado y modelado. La historia va de un joven que vuelve a Mundaun, el mencionado pueblo, para asistir al funeral de su abuelo, pese a las advertencias del sacerdote de que no fuese. La obra mezcla grácilmente mitología con religión y folclore. Y todas sus mecánicas están perfectamente integradas no solo para que tengan sentido jugablemente, sino también dentro de su mismo mundo. Una obra hecha con este cariño y presteza no puede sino ser más reconocida y no quedar en el nicho de juego de terror indie.

 

Sable

 

 

Manuel Casal – Sable

La estética no siempre lo es todo. Estos últimos años pudimos disfrutar de una serie de gifs que pusieron a Sable en el punto de mira de muchos de nosotros por su precioso y reconocible estilo artístico. Pero lo que no imaginábamos era que iba más allá. Puede que muchos de vosotros, como yo, encontréis en este mundo una sensación de desarraigo, de ausencia de “nuestro lugar”. Hay quien debe emigrar para encontrar trabajo, hay quien intenta por todos los medios establecerse cerca de su familia, pero a nuestra generación, la nacida en los noventa (aunque esto es aplicable a otras, arriba y abajo), le ha tocado encontrar su lugar en un mundo que parece de todo menos hecho para ella. Disfrutar de Sable en este 2022 puede, a mi juicio, acompañar a más de uno en este periplo tan absurdo, difuso y aparentemente infinito que es la vida del joven al que la incertidumbre le carcome por dentro. Algún lugar tenemos en el mundo, solo queda esperar a encontrarlo algún día.

Ignacio Ory – Democracy 4

Puede que no sea el prototipo de videojuego que se nos venga a la cabeza al pensar en la industria y los lanzamientos habituales, pero dadas las circunstancias en las que llevamos viviendo ya casi cerca de 2 años, creo que es un título que viene al pelo como recomendación. En constante actualización, y con multitud de escenarios diferentes que nos obligarán a tomar todo tipo de decisiones, puede que entendamos algo mejor (o ganemos en niveles de odio e ira) todo lo derivado de la pandemia a nivel sociopolítico. Además, como responsable no oficial de cubrir diferentes libros de geopolítica en esta web, el no mencionar a este proyecto de Positech se me empezaba a hacer ciertamente complicado. 

Aunque siga disponible bajo formato Early Access, y tenga ciertas carencias (tanto a nivel de contenidos como de posibilidades políticas), lo cierto es que no deja de entrar en ese selecto club de juegos en los que “un turno más” puede implicar perder varias horas intentando mejorar un indicador o sacar un mejor resultado en las siguientes elecciones. Con un 50% de descuento en Steam y soporte a largo plazo, ¿hace falta algo más para apostar por la democracia?

Alejandro Reinosa – Book of Travels

Estuve siguiendo su desarrollo desde muy de cerca, pues fui backer desde el comienzo del mismo, y no me arrepiento en absoluto, aunque he de admitir que no he jugado todo lo que debería, ha sido un año difícil, especialmente la recta final. A pesar de ello, esta entrada al año nuevo puede ser la excusa perfecta para volver una vez más a este pequeño MMORPG fantástico donde las esporádicas pero intensas relaciones que tendremos con los jugadores que nos encontremos por el camino y con los que solo podremos comunicarnos mediante emoticonos marcarán nuestra experiencia. Todo apunta que nuevo contenido irá llegando a lo largo del tiempo, otra razón más para empezar a hacer la maleta y lanzarnos al viaje de cara a obtener acceso a nuevas zonas, y por lo tanto, nuevos caminos que recorrer, un juego que este 2022, si abandona el early access para lanzar su versión final, puede dar mucho de lo que hablar, algo que sin duda podréis esperar en la web, pero mientras tanto, siempre podéis darle una oportunidad a este acceso anticipado, pues el contenido es suficiente, tanto en cantidad como en calidad.

Alejandro Corell – GTFO

La mitad de 2021 la he pasado esperando con ansias Back 4 Blood, y la otra mitad algo decepcionado por el resultado final, que si bien no ha sido una mala experiencia, no ha llenado el hueco que dejaron las largas sesiones de Left 4 Dead 2 con amigos. Ese hueco se mantuvo vacío hasta que me crucé con GTFO, que se trata de una versión hardcore de este estilo de juegos. Atravesar zonas oscuras, moviéndose con extrema precaución intentando no despertar a ningún enemigo, para atisbar a un compañero corriendo como pollo sin cabeza, atrayendo a todos los monstruos del planeta, es una de las situaciones más divertidas y terroríficas que se han cruzado en mi camino.