El probable resurgir de una saga atormentada por el síndrome del impostor

Hace unos meses ya hablamos de la posible vuelta a nuestras consolas de la saga de videojuegos de conducción arcade Need for Speed. Según contaba mi compañero Kuba, la saga había perdido cierto rumbo con el lanzamiento de Payback, por lo que el equipo de Ghost Games tuvo que tomar la decisión de volver a una fórmula clásica – en la que no haya tanta historia de policías y ladrones, al más puro estilo Fast and Furious 5, sino que predominen las carreras callejeras marca de la casa -.

Partiendo de dicha base, hace unas semanas se filtró la existencia de una nueva entrega. Puede que no pillase de sorpresa a muchos – ya que entre rumor y rumor, la verdad asoma – pero se filtraron tanto imágenes como los primeros detalles, como su acabado y ambientación. Finalmente, el pasado día 14 de agosto se estrenó el tráiler del juego con su título correspondiente, Need for Speed Heat, en el que podemos verificar por nosotros mismos cómo la promesa de volver a los orígenes ha sido cumplida, al menos, en gran parte. Sí, vuelven las carreras callejeras y se eliminan las carreras de todoterreno – innecesarias en Payback -, y también se inspira ese aire propio del rey de las calles de la ciudad (esta vez, Miami). No obstante, no nos quitamos de encima el perenne concepto de policías y ladrones, con un malo maloso que dirige a la policía contra los corredores callejeros.

Este último punto es el que hace que sea una vuelta a medias, ya que, sin duda, ese aspecto fue el que mató Payback (y, si me permitís, el reboot de 2015); no tanto el infantil juego de polis y cacos, sino el que haya una desangelada historia con una trama larga sobre la que intenta girar todo el juego, sin llegar a molestarse en favorecer la inmersión en la misma. Si este Need for Speed pretende hacerse otra vez con el título de rey de las carreras arcade, debe o bien realizar una apuesta narrativa como nunca antes, o dejarse de historias y centrarse en el callejeo, la esencia de la saga. Juegos como Most Wanted son lo que necesita la saga: queremos a velocidad, acción y frenetismo, pero no historias de cine.

Comentarios aparte – y buscando toda reminiscencia posible a la subsaga Forza Horizon, que, considero, sí ha conseguido hacerlo bien en estos tiempos -, en el tráiler se puede ver como la personalización va a ser mejorada, no solo en las prestaciones de los coches, sino también en lo relativo al aspecto exterior, en la aerodinámica de las piezas, etcétera. Vamos, lo que viene a ser el tuning noventero de toda la vida. Por otro lado, también se pueden ver distintos personajes llevando distintos modelos de coches (asumimos que, para distintos tipos de competiciones, Drift, Drag Race, y carreras urbanas a la antigua). Es posible que vuelvan a utilizar a las bandas de la ciudad para hacer distintas competiciones en las que dominar a los rivales y hacerte el rey de las calles, todo esto persiguiéndote la policía, esta es la forma de contentar a los jugadores, dándoles lo que quieren. Sea como fuere, a pesar de haberse visto poco del juego, ya promete, obviamente, hace falta saber muchas cosas antes de su estreno en noviembre de este año. Resta concretar la jugabilidad y, dentro de ella, detalles como la variedad de vehículos, aunque EA nunca ha tenido problemas con ello. *Bling, bling*.