¿Qué pasará mañana?

La industria del videojuego tiene muchas particularidades, y una de ellas es que puede haber periodos de tiempo, días, semanas o incluso meses, en los que no ocurre nada relevante. Y otros días, incluso tramos que abarcan horas, en los que pasa de todo. Y hoy, casualidades de la vida, tienen denominador común, las filtraciones. Y no de proyectos independientes que vayan a pasar precisamente desapercibidos, sino de las nuevas entregas de dos de las franquicias más relevantes del medio, como son Grand Theft Auto y Diablo, desarrolladas por Rockstar y Blizzard, respectivamente.

Si atendemos los sucesos en orden cronológico, Rockstar es la primera damnificada. Una serie de vídeos empiezan a distribuirse por la red, y a los pocos foros como 4chan (que sí, tiene la fama que tiene, pero para estar al día en estos asuntos es muy interesante) y servidores de Discord empiezan a echar humo. La nueva entrega de Grand Theft Auto VI se confirma sin el visto bueno de la desarrolladora, y tenemos acceso a supuestos elementos de la jugabilidad (como robos en tiendas, alejados de los atracos de la quinta entrega), cinemáticas y confirmación de elementos de la trama como varios protagonistas, subtítulo (Americas) y su ubicación (Vice City). Casi nada. Dado el uso de gran parte de elementos visuales del anterior juego (comprensible al estar aún en un estado temprano del desarrollo), había dudas en cuanto a la veracidad de las afirmaciones. Sin embargo, al poco tiempo Take Two empezó a reclamar todos los vídeos de Youtube. Cuando el río suena… Y hoy ha llegado el agua en forma de comunicado de Rockstar.

El hecho de confirmar los hechos habla por un lado de que en Rockstar tienen que estar muy seguros de todos los que se ha filtrado (que no tiene por qué corresponder con lo publicado), pero si además lanzas en el mensaje de que el desarrollo no va a verse afectado… Rockstar ya tiene un buen historial de crunch a sus espaldas, y no es descabellado pensar que los departamentos dedicados a este proyecto hayan pasado ya por alguna época del mismo. Pero con el precedente de Half Life 2 y su filtración, podemos esperar literalmente cualquier cosa.

Pero como las desgracias no vienen solas, Blizzard no puede obviamente tener un respiro en su descenso al inframundo (no pun intended) y hoy muchos nos hemos levantado con una filtración de más de 50 minutos de Diablo IV, procedentes de una prueba privada empleando una versión en desarrollo que en principio formaría parte de un programa abierto a amigos y familiares de trabajadores de la compañía. En resumen: el enemigo (para sorpresa de Blizzard, que parece que respeta las tradiciones ante todo) está en casa.

Por el momento, rebuscando bien, aún se pueden encontrar contenidos de ambos casos por la red, pero realmente es lo de menos a estas alturas, más allá de confirmar lo que era un secreto a voces, que Rockstar estaba desarrollando una nueva entrega de Grand Theft Auto. Porque del resto se pueden sacar pocas conclusiones en claro. Ninguno de los dos proyectos va a suponer un giro radical y absoluto en las fórmulas jugables que los han consagrado como referentes en sus respectivos géneros, y como mucho, las mayores dudas que se podían resolver podrían haber sido a nivel de trama y narrativa, pero irónicamente es lo más complicado de resolver en una filtración. De aquí al lanzamiento, tienen tiempo de cambiar y modificar todo lo afectado. Pero la marabunta (y el rato que todos hemos pasado cotilleando) ya ha pasado.