No es el momento, es la causa

Los tiempos cambian, al igual que lo hacen las tendencias de distribución. Antaño, atados al formato físico, las desarrolladoras y editoras se veían forzados a crear nuevas versiones de manera expresa si querían corregir algún error o añadir algún tipo de nuevo contenido. Con la progresiva normalización de las tiendas digitales y la expansión de los parches, no era necesario un motivo real para proporcionar una actualización a un título. Pero ahora hemos dado marcha atrás, y creo que el caso de Sifu es el más representativo de lo que puede ser la nueva hornada en lo que a tendencias de distribución se refiere.

En el caso del título desarrollado por Sloclap, llegó a PC (a través de Epic Games Store, detalle a tener en cuenta en la historia), PlayStation 4 y PlayStation en febrero de este mismo año, mientras que su llegada a Nintendo Switch se demoró hasta noviembre. Para llegar a completar la colección de plataformas en las que Sifu está disponible, toca esperar hasta marzo de 2023, cuando llegará a Xbox Series X|S y Xbox One, así como PC en Steam. ¿El fin de las exclusividades temporales? El mejor motivo para estrenar una nueva actualización de contenido.

No todo es cuestión de generar teorías conspiranoicas ni criticar a las distribuidoras (en esta ocasión), sino señalar los cambios de tendencia. Es habitual aprovechar un nuevo lanzamiento (no tiene por qué siquiera ser la llegada a una nueva consola o tienda digital, puede ser mismamente la publicación de una edición física del proyecto) para publicar nuevo contenido y simplemente volver a atraer el interés de los usuarios y la comunidad. El grueso de las ventas de cualquier juego tienden a darse en las primeras semanas en las que está disponible, quedando luego un nicho de ventas residuales que poco a poco se van acumulando para gloria de los propietarios de los derechos correspondientes. En casos puntuales, como Among Us, que se viralizan de forma masiva, se dan excepciones a la norma, pero fuera de ese factor suerte, la mejor manera de revitalizar una curva de ventas suele ser una actualización de contenido, la llegada de una nueva edición que reviva el interés o, como en el caso de Sifu, aprovechar la una y la otra para combinarlas.

Y es la casualidad de que coincida con la finalización de una exclusividad temporal lo irónico de la situación. Nuevas actualizaciones y ediciones han existido siempre, pero rara vez por este motivo (al menos en PC, donde la universalización era la norma), y esto no deja de ser fruto de las agresivas políticas de Epic Games Store para hacerse un hueco en un ecosistema (que sigue) dominado por Steam. En el caso de Sifu, tampoco es que este nuevo parche vaya a ser un cambio revolucionario en lo que al juego se refiere, ya que se trata de un compendio de desafíos que nos permitirán desbloquear nuevos modificadores, técnicas y aspectos para nuestro personaje. No deja de ser un motivo más para volver a superar el desafío que nos propone Sifu, pero es a la vez la perfecta representación de que no hace falta reinventar la rueda para volver a estar en boca de los jugadores. Quiero decir, el juego llegará en marzo de 2023 a Steam, Xbox One y Xbox Series X|S, y aquí estoy yo, hablando de la novedad a tres meses vista. Cualquiera diría que el objetivo está más que conseguido por parte de Sloclap.