Porfi

Tras una larga temporada en la sombra, el RPG de acción desarrollado por Obsidian, The Outer Worlds, ha arrojado algo de luz sobre su exclusividad temporal con Epic Games Store. A lo largo de este periodo, el título solo se podía conseguir a través de dicha plataforma, pero ahora, tras la finalización del contrario, la aventura al fin prepara los detalles para su llegada a Steam. Así es como hemos podido saber que el título se podrá conseguir también en la plataforma de distribución digital de Valve a partir de próximo 23 de octubre. Con este movimiento y abriendo el título a otra plataforma de mercado, es muy probable que los jugadores de The Outer Worlds incrementen su número a lo largo de las próximas semanas.

 

 

No obstante, las sorpresas no terminan aquí, y es que según el conocido analista Daniel Ahmad The Outer Worlds 2 podría estar ya en su fase de pre-producción. La noticia prendió su mecha con un primer tweet, donde el analista respondía a otro tweet en el que se hacia referencia a la llegada del primer capítulo a Steam. Obsidian (ahora ocupada con Grounded, un juego de supervivencia en miniatura con un plan de contenido a largo plazo, y con Avowed, el ambicioso RPG en primera persona que llegará de forma exclusiva a PC y Xbox Series X | S), por supuesto, no ha querido comentar nada al respecto, por lo que deberemos esperar para ver si el rumor comenzado por Ahmad es correcto.

¿Es la exclusividad [digital] el camino correcto?

Durante las últimas dos décadas hemos visto con nuestros propios ojos cómo la carrera por crear exclusivos ha supuesto la diferencia entre una plataforma y otra, algo que a día de hoy se antoja lógico, natural. La batalla entre Sony y Microsoft por ofrecer juegos exclusivos ha sido durante muchísimos años un factor determinante a la hora de plantarse qué consola comprar, algo que se ha reavivado (aunque en menor medida) con la llegada de la nueva generación. ¿Pero qué pasa con PC? Esta plataforma podría verse muchas veces en un terreno de nadie, pero ¿qué sucede cuando la exclusividad no pertenece tanto a una marca, sino a una tienda digital? En una contemporaneidad donde la posibilidad de adquirir un juego para PlayStation o Xbox ha quedado resumida en la apertura de una aplicación desde nuestro sistema de juego o dispositivo móvil (raro resulta ahora, en un mundo post-COVID, ir a una tienda a comprarlo físico), los jugadores de PC a menudo ven cómo la batalla entre las plataformas digitales para conseguir estos juegos hace que el jugador sea el más escaldado.

The Outer WorldsEs una obviedad que ha llovido mucho desde que íbamos a comprar los juegos para PC a nuestra tienda física favorita y adquiramos el juego en formato físico. Con los códigos de descarga y el avance de internet, esta forma de venta se ha visto cada vez más olvidada, de la misma manera que ocurrirá con los formatos de las nuevas consolas. ¿Hasta qué punto, con ello, no sale perjudicado el jugador? Con la decisión que tuvo Obsidian de darle exclusividad a Epic Games Store durante este primer año de juego, se obligó al jugador de PC a tomar la decisión de o no jugarlo o tener que adquirir un juego en una tienda que tal vez no fuese de su agrado. Y no hablamos de un indie sin editora, pues detrás de él estaba Private Division. No sabemos cuánta, pero, desde luego, pasta había.

Es lógico que muchos jugadores no quieran tener tal vez que crearse una cuenta en una store cuya política de empresa se sale del camino que ellos piensan, o que simplemente quieran tener la comodidad de tener todos sus juegos (o trofeos) en otra store digital, creando así una obligatoriedad ante el jugador de tener que comprar el juego en una plataforma que no quiera. Entiendo que un título o llegue o no a una plataforma, pero el hecho de que llegue a la susodicha y se te obligue a tener que adquirirlo en una tienda en concreto (quién sabe si al usuario le interesa apoyar a dicha empresa) es algo que no me parece ético ni respetuoso con el comprador. Limita las opciones de mercado, no te ofrece la libertad de comprar donde tú quieras y, sobre todo, brinda a ese gigante imparable y odioso más fuerza aún.