Reduce su plantilla hasta los 25 empleados

Ayer por la noche, prácticamente de madrugada, se dio la noticia de que Telltale Games había realizado un despido masivo esa misma mañana, reduciendo su plantilla hasta los 25 empleados y con múltiples rumores de cierre próximamente, siguiendo así el (triste) camino de Capcom Vancouver, que cerrraba sus puertas esta misma semana. Confirmada la noticia algo después por parte de Pete Hawley, CEO del estudio, se han publicado múltiples comunicados por parte de varios factores, incluyendo uno de Kevin Bruner, uno de los fundadores originales del estudio que fue despedido el año pasado y que ha dado otro punto de vista más a la situación.

Causas de esta decisión

Ayer mismo os traíamos una noticia que tenía a Telltale Games como protagonista, en el papel de distribuidora, un rol que la empresa no ha asumido como forma principal de negocio, pero que sin duda habrá tenido repercusión en las cuentas econónomicas de la misma, y posiblemente no en el buen sentido, ya que la distribución implica riesgos muchos mayores, con costes asociados que pueden no recuperarse, de la misma forma que el desarrollo de un proyecto no se rentabiliza si éste no resulta exitoso. De hecho, tal y como indica el comunicado publicado por Pete Hawley (que dejamos a continuación), ésta ha sido una de las causas que ha llevado a la empresa ha despedir al 90 por ciento de su plantilla, ya que a pesar de que sus juegos funcionaban muy bien a nivel de crítica, en lo respectivo a las ventas parecen haber agotado la fórmula.

 

Según se dio a conocer anteriormente, el estudio no pasaba por su mejor momento, estando inmersos en múltiples proyectos de forma simultánea y en una situación de Crunch constante (concepto que se utiliza durante el desarrollo de proyectos empleado para describir el periodo de trabajo extra para llegar a la fecha desingnada), que acabó repercutiendo no solo en la calidad de sus juegos sino también en la Telltale Tool la cual anunciaron también hace poco que dejarían de lado para sus proyectos, con múltiples limitaciones conocidas como la ausencia de físicas que hacían complicado su uso.

Licencias en el limbo

Según ha anunciado UsGamer, parece que la compañía apunta totalmente al cierre, y que el factor de no haber despedido a la plantilla en su totalidad y finalizar su actividad se debe a las obligaciones contractuales que tienen con Netflix por Minecraft Story Mode, el que será el último título de la compañía de forma prácticamente segura. De esta forma, se asume que The Walking Dead: Final Season queda cancelada (tendremos que esperar a ver como gestionan los pases de temporada en caso de confirmarse la noticia) y que el resto de licencias de la compañía quedan en el aire, incluyendo el proyecto que tenían con la ya mencionada Netflix en el universo de Stranger Things, respecto a lo cual han declarado lo siguiente:

Nos entristece el cierre de Telltale Games, que desarrollaron muchos grandes juegos en el pasado y dejaron una huella imborrable en la industria. Minecraft: Story Mode sigue avanzando según lo planeado. Estamos en el proceso de evaluar otras opciones para dar vida al universo de Stranger Things en un medio interactivo.

Por lo pronto, se desconoce si alguna gran compañía tratará de adquirir los restos de Telltale, pero personalmente creo que, aunque eso llegara a suceder, la compañía tal y como la conocemos estaría muerta. En caso de ser absorbida, por ejemplo, por Microsoft (que ya adquirió varios estudios de forma reciente) o Valve (que hizo lo propio con Camposanto), probablemente se verían forzados a cambiar su modelo de juegos episódicos, el cual ha confirmado no ser rentable, al menos desde lo que conocemos.

The Walking Dead Season FinaleOtra idea que se ha lanzado por varios círculos es que las licencias se vendan por separado al mejor postor, siguiendo un proceso similar al que se llevó en su día con THQ, pero que de igual manera, creo que no sería la mejor manera de garantizar el legado de la empresa, ya que son juego en cierto sentido particulares y que no cualquier estudio podría replicar. A falta de confirmarse más movimientos en consecuencia de este anuncio, creo que la peor parte de todo este asunto se la han llevado los propios empleados, que de un día para otro (repito, desde lo que se sabe de forma pública, ya que es posible que estuvieran informados de ante mano) y que tendrán que buscar su hueco en otra compañía, y aunque no vayan a tener demasiados problemas para encontrarlo, hasta entonces, se encuentran en el paro.