No más destripes como el de The Last of Us

En cualquier videojuego el suspense es un elemento básico. Lo es en aquellos basados en una narrativa embebida porque es el director quién nos plantea la historia y, si sabemos lo que va a pasar, el título pierde todo su atractivo. También lo es en aquellas obras con narrativas emergentes en las cuales creamos el argumento, cuando la gracia es descubrir por sorpresa las consecuencias de nuestras acciones. En los dos casos, la falta de imprevisibilidad fulmina las ganas de saber más y la sensación de progreso. Muchas veces la sorpresa se pierde con los tráileres. No hace falta que contengan spoilers explícitos de la trama, tan solo basta con que se nos queden grabadas ciertas imágenes. Me pasó con Metal Gear Solid V: The Phantom Pain. Mientras veía los avances no era capaz de descifrar el guion, pero a los mandos todo era distinto: intuía el desarrollo de una cinemática haciendo asociaciones entre las imágenes en pantalla y las del tráiler. Sin embargo, fue mi responsabilidad ver esos vídeos. El problema es cuando te encuentras por casualidad un spoiler explícito que acaba jodiéndote toda la historia del juego.

Hay que pasar de la frustración…

Eso sucede sobre todo en los grandes foros de Internet, en los comentarios de los mismos tráileres o en redes sociales como Twitter. En la sociedad moderna la información es abundante. A los medios de comunicación tradicionales se les suman multitud de personas que quieren transmitir sus historias. Las entidades siguen teniendo su influencia capital en la opinión pública, pero compiten con millones de usuarios. Con gente que dispone de información interesante que nos descubre hechos que las grandes corporaciones nos esconden. Lamentablemente no vivimos en un mundo feliz y existen internautas que prefieren divertirse filtrando aspectos de los juegos. Ahí está el ejemplo reciente de The Last of Us: Part II. Sony sabe que no se trata de un caso aislado, que es una dinámica recurrente que le puede afectar a cualquier videojuego. De ahí que patentara en 2018 un sistema anti-spoilers que ahora sale a la luz gracias a Respawn First; una herramienta para evitar escándalos como en el que se ha visto envuelto el título de Naughty Dog.

¿Cómo funcionaría esta herramienta? Muy fácil. Los desarrolladores marcarían momentos determinados momentos de la aventura como un posible spoiler. Si no hemos llegado a ese punto del juego, se nos avisaría que estamos ante un contenido sensible, pudiendo respetar la advertencia o saltárnosla. Nuestra consola almacenaría datos de nuestras partidas para avisarnos. Sin duda, sería un método plausible de aplicar en el ecosistema Sony a través de los servidores. No obstante, no creo que el mayor enemigo sean las comunidades de PlayStation; tan solo son una parte de la cuestión. Es en los foros y redes donde se genera la mayor parte de la conversación. Por ello, los nipones señalan que estarían desarrollando un “método cruzado entre plataformas”. No queda claro cómo lo llevarían a cabo, pero esa es la clave: controlar el terreno con más tráfico de spoilers. Si son capaces de realizar esa supervisión estaríamos hablando de un sistema revolucionario. No solo en los videojuegos, también en otras industrias como en la de la televisión. Podrías entrar en Reddit sin peligro de que te destriparan la última temporada de la mejor serie de Netflix, es decir, Ozark.

… a las risas.

Ahora que se acerca la nueva generación se está hablando mucho de la potencia de las consolas de Sony y Microsoft, a la vez que se especula sobre qué títulos las acompañarán en sus lanzamientos. Sin embargo, no se está discutiendo sobre cómo integrar mejor a las comunidades en los juegos. Sí, sabemos que los nuevos mandos incorporarán de nuevo el botón share, empero a parte de eso no se ha anunciado ninguna política en concreto. Se trata de un terreno casi inexplorado. Solo algunos creadores como Kojima lo han hecho con la colaboración de millones de jugadores en un única experiencia jugable. Con respecto a Sony, su sistema anti-spoilers contribuiría a la mejora del bienestar de las comunidades, evitando que el miedo campara a sus anchas. En ese sentido, los japoneses deberían aprovechar esta oportunidad. El desarrollo de esta patente supondría una ventaja frente a la competencia. Mandarían un mensaje claro: nos importan nuestros jugadores y hacemos todo lo posible por cuidarlos.


PlayStation 5 guarda muchos secretos

O al menos es lo que decía hace unos días Matt Hargett, antiguo Ingeniero de Software Principal de Sony. Ojalá que entre esas características esté la protección contra los spoilers. Es muy frustrante no disfrutar de una obra que llevas esperando mucho tiempo. De la misma forma es negativo para las compañías, las cuales pierden potenciales consumidores. Esto nos reafirma como los protagonistas de este ocio. Si no jugamos, la industria se hunde. Importa poco si Rockstar crea el mundo abierto más rico de la historia si no hay nadie pasando por caja. Hay que preocuparse por la comunidad, no subiendo el precio de servicios como PlayStation Plus cuyo motivo de existencia es hacerte pagar por el juego online, sino con medidas como las señaladas en la patente anti-spoilers.