Firestorm, Warzone, Hazard Zone, y ahora...

Battlefield Logo

Tras años de desarrollo, mucha expectativa y una beta que no ha dejado a nadie indiferente (y que personalmente disfruté bastante), Battlefield 6 apunta a ser el shooter del año en un 2025 en el que Black Ops 7 también llega pisando fuerte, y en el que además han destacado un nuevo DOOM y un exitoso port para consolas de Ready or Not. A prácticamente un mes de su lanzamiento, no nos paran de llegar nuevos detalles y noticias sobre la nueva entrega bélica de DICE, siendo la última de ellas la confirmación (a través de un gameplay filtrado) de un modo battle royale totalmente gratuito con fecha de lanzamiento aún por confirmar.

Como muchos ya sabréis, esta no es la primera vez que la saga trata de incorporar este popular modo de juego a una de sus entregas (de hecho, sería la tercera vez que ocurre), y Call of Duty: Warzone ya parece haberle comido la tostada a Battlefield en este aspecto. Además, la versión de la franquicia de Activision es cada vez menos popular y exitosa fuera de su nicho, hasta el punto en el que su versión móvil apenas ha durado un año. Con estos datos el modo battle royale de Battlefield 6 parece condenado al fracaso, persiguiendo una tendencia que ya no atrae a jugadores fuera de Fortnite, pero puede que tenga una oportunidad.

El as bajo la manga

A pesar de lo similares que pueden llegar a ser Call of Duty y Battlefield como franquicias, hay pequeñas diferencias que siempre hacen que cada persona se decante más por uno que por otro o que disfrute de ambas por razones muy diferentes. Es cierto que Warzone ya rellenó el hueco de un battle royale más “realista” y estratégico, en el que nos movamos por zonas de guerra basadas en lugares reales a pie o con vehículos mientras sentimos el peso de cada arma, de cada movimiento y de cada disparo, pero hay un elemento de Fortnite que Warzone no se atrevió a adaptar: la destrucción del mapa.

La mecánica más famosa de Battlefield, a la que se le ha vuelto a dar énfasis en el marketing de Battlefield 6, es el factor sorpresa de su battle royale. El modo Firestorm de Battlefield V ya se atrevía a incorporar esta mecánica al género, pero donde creo que se podría destacar esta vez es en el enfoque que se le de a esa destrucción. El problema de enfocar la destrucción del mapa de la misma manera en el modo battle royale que en las partidas normales (como hacía Firestorm) es que en este caso no podemos reaparecer de forma constante en diferentes puntos para ver cómo se va destruyendo todo, tendremos como máximo dos oportunidades.

Por este motivo, creo que la destrucción del mapa debería tener un enfoque totalmente nuevo, en el que se tenga en cuenta la limitada experiencia que tendrán todos los jugadores que no alcancen el top 25 de la partida, en lugar del mismo funcionamiento que en una partida de 64 jugadores en la que se te puede caer un edificio encima y volver a la vida a los pocos segundos. Si el battle royale de Battlefield 6 consigue darnos un giro interesante e innovador para esta mecánica, ya estará un paso más cerca del éxito.

Jugando en casa

Algo que caracteriza tanto a juegos como Fortnite o Apex Legends como a Battlefield es el gran tamaño de sus mapas. Esto es algo a lo que las distintas entregas de Call of Duty se han mantenido ajenas, con mapas más pequeños en los que las decisiones de último segundo y la memorización de cada pasillo, habitación y posición estratégica lo son todo. Warzone fue la primera vez en la saga en la que veíamos un mapa tan grande. Por otro lado, en Battlefield 6 todos los mapas son grandes, por lo que el tamaño de un mapa del modo battle royale no dista demasiado de lo que suele hacer la saga en sus partidas online de conquista.

Esta mayor experiencia a la hora de diseñar mapas de gran tamaño puede suponer un punto a favor para Battlefield 6 respecto a su competencia, pudiendo aprovechar más la verticalidad, lo diferentes que sean las zonas del mapa y la travesía entre puntos estratégicos. En el cada vez más difícil de encontrar gameplay filtrado, podemos ver como hay una escalera desplegable que sirve como herramienta para subir a lugares altos o cruzar distancias en las que un salto no bastaría, demostrando que el diseño de mapas enormes se siente como jugar en casa para el equipo de DICE.

También se suma a los puntos a favor frente a Warzone la rumoreada integración de este modo battle royale en Portal, el editor de Battlefield 6 que permite a los jugadores establecer las reglas y crear servidores personalizados. Si este rumor finalmente fuera cierto, le podría vida a este modo de juego más allá de sus eventos o temporadas oficiales, de manera similar a los mapas y experiencias creadas por usuarios que vemos en Fortnite, que resultan un gran atractivo para quienes se hartan de las partidas convencionales y quieren jugar a otra cosa, pero sin saltar a otro juego directamente.

No todo es positivo

Aún con todos estos posibles puntos a favor que podrían diferenciar al battle royale de Battlefield 6 de Warzone, no tiene todo a su favor. La jugabilidad de ambos títulos, en su base, seguirá siendo muy parecida, por lo que esa diferenciación finalmente dependerá de la manera en la que funcionen cosas como las armas y su rareza, las distintas clases o la posibilidad de resucitar dentro de cada partida, cosas sobre las que todavía no hemos tenido información. Tampoco podemos ignorar esa sensación de que este battle royale llega a destiempo, y que tal vez sería mejor un modo de juego completamente nuevo en lugar de intentar subirse a algo que ya ha pasado de moda.

Battlefield 6

Como espero haber demostrado, Battlefield 6 tiene la oportunidad de convertir lo que parece un intento de sacar dinero fácil en algo novedoso que consiga atraer incluso a jugadores que no estén interesados en las entregas principales de la saga, pero su éxito o fracaso dependerá de cuanto se llegue a aprovechar este potencial. De momento, seguiremos calentando motores para el 10 de octubre, cuando veremos si todo lo que se nos prometió en la beta más popular del año se acaba cumpliendo. Sin embargo, tras todos estos pensamientos en frío sobre el tema, mentiría si dijera que no tengo curiosidad y un poco de ganas de poder jugar este misterioso battle royale de aquí a (probablemente) unos meses.