Un largo y solitario camino
Stardew Valley, Papers Please, Return Of The Obra Dinn, Minecraft, Undertale, Tetris… ¿Qué tienen en común estos títulos? ¿Qué todos son juegazos? Pues sí, pero además de eso, todos fueron creados por una sola persona. Una proeza al alcance de pocos que puede conllevar un recorrido muy largo y lleno de dificultades. Desde aprender a manejar las herramientas y el motor gráfico que utilices en tu proyecto, hasta solucionar lineas de programación recónditas en enorme código del juego. Sin contar, por supuesto la ingente cantidad de horas, meses y años que requiere este trabajo y que no puedes tener certeza de si te reportará ganancias económicas en el futuro. Muy pocos títulos de este tipo explotan en ventas y fama, no todos pueden ser un Balatro, que también fue creado por una desarrolladora compuesta por únicamente una persona. En la mayoría de ocasiones esas personas dedican todo su tiempo y dinero por puro amor al mundo gamer. Pero a pesar de esas dificultades e incertidumbres siguen su sueño y gracias a esto hemos podido presenciar autenticas obras maestras de los videojuegos y, también, auténticos genios de la programación.

Aunque los ejemplos que os he dado son todos internacionalmente conocidos, tampoco tenemos que
cruzar el globo para encontrar gente con el mismo talento. Es más, no necesitamos ni salir de nuestra península porque de España también han salido grandes trabajos realizados íntegramente por una sola persona. Podemos poner el ejemplo del desarrollador Locomalito, que nos ha traído grandes experiencias como el matamarcianos Super Hydorah en 2017 o una de sus obras más conocidas y que salió hallá por el 2012: Maldita Castilla. Este último es todo un homenaje a clásicos como Ghost’n Goblins o Shinobi pero sin nada que envidiarles ya que como juego de acción tiene una gran personalidad particular. Además, un tiempo después, en 2016, lanzaron Maldita Castilla EX, una versión mejorada que contó con una edición coleccionista brutal para Nintendo Switch y que se llevó el premio a “Mejor edición física” en los premios DeVuego 2021.
Tampoco podemos olvidarnos de UnEpic, una aventura que en 2011 nos devolvió a aquellas sesiones de Dragones y Mazmorras y que nos llegó de la mano de UnEpic Games, integrado por aquel entonces nada más que por una persona: Francisco Téllez de Meneses. A día de hoy ya son cinco integrantes y su renombre ha crecido como la espuma desde 2021 con el lanzamiento del hilarante UnMetal, una parodia de los primeros juegos de la franquicia Metal Gear que ya ha salido en formato físico para todas las plataformas y que también cuenta con una edición coleccionista increíble.
Odas al Terror
Estos son solo algunos ejemplos pero hay muchos más. Muchas personas que se dejan la piel en un proyecto que les cuesta sudor y lágrimas llevar a buen puerto. Hoy estoy aquí para dar voz a una de esas personas desconocidas y hablaros de uno de sus últimos juegos: The Sinking Forest. Tony es un desarrollador enamorado de los juegos de terror desde bien jovencito y eso le llevó a expresar su cariño hacia ellos de la mejor manera posible. Inspirado por los títulos de terror que probó en su infancia, como Alone In The Dark, y los que ha seguido disfrutando ya de adulto, se embarcó en el periplo de ser un “solo developer”. Es esperanzador pensar que en los pocos años que lleva como tal, ya cuenta con cuatro juegos publicados, estando dos de ellos también en formato físico. Los títulos de Tonydevgame se especializan en ser historias cortas, de unas 5 horitas, centradas en el genero de terror y terror psicológico. Y no es porque sea de Alicante, la tierra que me vio nacer y crecer, pero hay que reconocer que para llevar tan poco en activo como desarrollador tiene un talento que vale la pena explotar.
En The Sinking Forest somos un joven que busca desesperadamente a Sayuri, su hermana desaparecida. La última información que tuvimos sobre ella nos conduce de noche a una remota aldea, perdida entre los bosques del japón rural. En este misterioso lugar nada es lo que parece ya que desde que ponemos un pie en las ruinosas calles del lugar, vemos unos maniquíes de madera inquietantemente sospechosos. Cuanto más nos adentramos más turbio, sangriento y peligroso se vuelve todo hasta descubrir la terrible verdad que esconde el pueblo y sus lignarios guardianes a quienes se les conoce como ángeles. Una trama cargada de tensión que iremos destripando poco a poco y que desde el primer momento se antoja interesante. Bien contada y cerrada en las 2-3 horas que nos puede durar la historia principal. Tanto el ritmo como las mecánicas nos pueden recordar en más de una ocasión a grandes del género como Silent Hill o Fatal Frame —conocido como Project Zero en nuestras tierras—, sagas que marcaron el camino de Tony como desarrollador. Una buena cantidad de puzzles donde tendremos que explorar el escenario para encontrar pistas y objetos necesarios que nos den las claves que nos hagan avanzar. También tenemos algunos periódicos y páginas escondidas que nos explican más del lore del juego, igual que hemos visto en otras IP’s como Resident Evil.
Desarrollado con Unreal Engine 5, la ambientación es más que decente y nos mantiene en tensión la mayor parte de la aventura. Tanto visual como sonora, ya que los sonidos y melodías tétricas que suenan mientras exploramos las calles y edificios de esa aldea abandonada no nos darán mucha sensación de seguridad. Perfecto para un videojuego de terror. Pero llevar a cabo un proyecto así en solitario tiene sus limitaciones, y como nada es perfecto en The Sinking Forest también vemos ciertos problemas que, si bien no estropean la experiencia, puede crear algún momento empeore la inmersión. Por ejemplo las físicas del juego hay veces que parecen llevar diez RedBulls encima porque con solo tocar un barril puede salir despedido al pueblo de al lado. También hay algún error de programación por ejemplo cuando debemos utilizar unos prismáticos para vislumbrar el camino a seguir. Si nos da por pulsar el botón de zoom mientras estamos usando este objeto volveremos a la vista normal pero con el marco de las lentes en pantalla y sin posibilidad de volver a hacer el mismo zoom de antes. Así, si queremos aprovechar este error, podemos jugar el resto de la experiencia de esa forma, dando le un toque más cómico del que debería. Como digo son fallos menores en comparación con todos los aciertos que ha conseguido TonyDevGame en cuanto a ambientación, jugabilidad e historia.
Una calidad de miedo
En general, The Sinking Forest es una buena, aunque corta, experiencia. Trama que, aun sin ser muy profunda ni tener giros de guión, es interesante y gana todavía más con la buena ambientación conseguida. Mención especial también a detalles de los escenarios como las ofrendas en lápidas, las breves pero interesantes historias sobre algunos Yokai y al hecho de que a los maniquíes enemigos les brillen los ojos. Parece una tontería porque así podemos saber su ubicación pero en mi opinión poder ver esos brillantes puntos rojos hace que me sienta vigilado y le da un punto de tensión a la exploración. Con sus más y sus menos es un título que vale la pena probar si te gustan los juegos de terror y el folclore del japón profundo. Aunque tenga sus puntuales errores en físicas o algún margen de mejora en cuanto a gráficos, puede darte una noche terrorífica y muy entretenida. Además su edición física, la cual nos trae Tesura Games, incluye caratula reversible y un bonito talismán otuda que puedes usar de decoración o marcapáginas. Por los 25€ que cuesta no esta nada mal.
Sin duda un trabajo increíble y un ejemplo de desarrolladores en solitario que vale mucho la pena seguir y apoyar. En mi opinión gente con este talento podría crear obras únicas si tuviera en su poder la mitad de recursos que poseen grandes empresas de juegos triple A. Pero la mayoría ha empezado desde cero y en este caso, aunque le quede un largo camino por recorrer, se puede ver en todos los juegos de Tony un gran amor y dedicación hacia lo que hace y comparte. Desde su primer juego (Jack Holmes : Master of Puppets PROLOGUE), free to play estrenado en 2023, hasta The Scarlet Harvest, la última experiencia de terror que nos trajo el alicantino el pasado 23 de octubre, todos son títulos que rebosan calidad. En mi caso estoy deseando ver que más nos tiene preparado este gran programador y, sobre todo, estoy deseando hablar de él en INDIEferente donde seguro que dentro de poco oís hablar de alguno de sus proyectos. Gracias, Tony, por confiar en nosotros para dar a conocer tu juego y sigue como hasta ahora porque tienes jugadores que te apoyan y valoran lo que haces. Yo ya soy uno de ellos. 
