Regreso al Futuro

Cuando el río suena, agua lleva. Y cuando hay patentes de por medio, como esta de Mark Cerny (arquitecto de sistemas responsable de PlayStation 4 y PlayStation 5, casi nada) relacionada con la retrocompatibilidad de consolas anteriores, toca como mínimo arquear una ceja y esperar que los acontecimientos se resuelvan. Esta había sido uno de los estandartes de Sony en sus diferentes consolas, y el salto a PlayStation 4, más allá de la campaña totalmente opuesta a Xbox One, destacó por su ausencia. Y ahora, con una generación de retraso, parece que regresa. Mejor tarde que nunca, supongo.

Pero si a estas patentes, que pueden pasar más o menos por alto al ser registros que pueden emplearse más como protección que de cara a su uso real, le añadimos curiosos errores (ya vistos alguna vez, pero rara vez las coincidencias existen) en la PlayStation Store, las sospechas, como mínimo, van dotándose de fundamento. Todo en base a hipótesis, pero menos da una piedra.

Más allá de que estos rumores pueden acabar siendo humo (y que, siendo honestos, sería lo más probable), la tecnología para emular PlayStation 3 (y sus predecesoras) en los sistemas actuales es más que viable a nivel técnico, y es cuestión de tiempo que llegue a los usuarios. Ahora bien, lo que no sabemos es el modelo bajo el cual podría llegar, siguiendo un modelo como el de Microsoft, implementado ya en los tiempos de Xbox One, o utilizando el rumoreado servicio de Sony que sirva de competencia a Game Pass como muro de pago para acceder a estos títulos.

Si nos ceñimos a la “retrocompatibilidad” tal y como la hemos conocido hasta ahora, ocultarla tras un servicio de pago sería todo lo contrario a ofrecer esta funcionalidad. Precisamente el punto fuerte de la retrocompatibilidad es poder seguir disfrutando de títulos que ya tienes, pero sin pasar de nuevo por caja, aunque sea de forma moderada. Eso tiene otro nombre, se llama versión HD. Y todo el tiempo que pasa entre estas sospechas, y un anuncio de Sony al respecto (o aunque sea, un triste comunicado confirmando que están trabajando en ello y que habrá novedades próximamente) es una clara invitación a pensar que van a optar por ese camino, poniéndole una alfombra roja a Microsoft en el ámbito de los servicios, por si le hacía falta.

Está claro que Sony no acertó (o no supo acertar) con PlayStation Now, un planteamiento diferente a Game Pass, y que lo que queda de ese proyecto es más un muerto viviente que otra cosa. Pero no por ello hay que caer en el error de hacer exactamente lo que hizo Microsoft con Xbox One, regalándole una campaña de marketing que permita realzar el valor de un servicio (dejando a un lado la propia retrocompatibilidad de Microsoft) solo por ingresar unos tristes euros más, dejando de lado la fidelización de usuarios que pueda perder por el camino. ¿Visión a corto plazo o a largo? ¿Necesidad de sacarle rentabilidad económica a una tecnología que ya está más que amortizada solo por las pocas consolas que puedan venderse a raíz de su inclusión? Sinceramente, cuanto más tiempo pase, peor huele el asunto. Y mira que Microsoft lo tiene difícil para desbancar a Sony como principal fabricante de consolas, pero seguro que si se lo proponen, pueden ponerle en bandeja ese primer puesto sin esfuerzo.