Probamos la demo de lo nuevo de Anima Project

Hace un par de días tuvimos la oportunidad de probar la demo Anima: The Nameless Chronicles, la continuación de la saga Anima, que nos dejó probar unos 15-20 minutos de juego. Ese tiempo jugado era lo que parecía una introducción a la historia, que nos contaba brevemente de lo que tratará el juego, y que sirvió a modo de un pequeño tutorial.

El juego abría con una introducción en la que se nos mostraba al protagonista de la entrega, El Sin Nombre, el cual, anterior antagonista, parece ser un ser inmortal que vive buscando su propio fin. Tras una merecida presentación, la secuencia nos mete un poco en contexto, dejándonos ya en las manos del personaje. Aunque solo hayamos podido jugar 15 minutos, creednos que nos gustaría haber jugado mucho más, pues la demo nos desveló una diminuta parte del gran potencial que esconde esta secuela.

Anima

En ese ratito de juego pudimos ver el inicio de la historia y comenzar por fin con los combates que tan bien se desarrollan en el juego, y en la saga en general. Con lo que parece ser una habilidad potenciadora, el protagonista muestra todo su poder frente a algunos NPCs que intentan impedirnos el paso para luchar, a modo de colofón, contra aquel que ha osado desafiar al inmortal Sin Nombre.

Además de esa habilidad especial, contamos con un ataque a distancia que nos será útil para aquellos combates en los que los enemigos no estén en tierra, sino volando. También con un ataque básico, ejecutado con la espada del protagonista, y con una habilidad que golpea y eleva al enemigo, casi a modo de gancho, dándonos la oportunidad de realizar brutales combos con las habilidades ya nombradas. Resulta curioso ver la doble funcionalidad de dichas técnicas, pues la habilidad potenciadora no solo sirve para llevar nuestro ataque a otro nivel, sino que cuando la tenemos activada también nos da la posibilidad de cambiar de forma los ataques ya nombrados, puesto que los recubre con un aura roja que da la sensación de ser bastante destructora.

Lo que nos lleva a ese primer combate contra NPCs es el desafío del Inquisidor y sus compañeros, los cuales pretenden acabar con la vida del inmortal, quedando este obligado a luchar para derrotarlos con las habilidades que os he descrito antes. A esas habilidades se le suma un control bastante intuitivo del personaje, y gracias a eso podemos ejecutar los combates exitosamente sin la necesidad de un tutorial que nos enseñe a movernos, atacar, o realizar otras acciones un tanto básicas. Las mecánicas presentes en el combate, aunque no sean nada complejas, aportan cierta sensación de poder y de afán de destrucción, pues contribuyen a meternos en la piel de un ser realmente mortífero que constantemente nos hace preguntarnos quién es el verdadero enemigo o ‘malo de la película’.

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Junto a ese apartado jugable intuitivo podríamos pasar a destacar el apartado gráfico. En este aspecto, podríamos decir que el juego es un tanto peculiar, ya que no busca esa calidad gráfica exagerada de los personajes, ni ese detallado entorno de Final Fantasy XV, pero sí que es cierto que tiene mucha personalidad. Los personajes tienen un modelado un tanto extraño que nos hace pensar que podrían pertenecer incluso a un juego bastante antiguo, no obstante, he ahí su grandeza. No busca una calidad gráfica que sea capaz de rellenar el hueco que dejan otros apartados por simples o reguleros, sino que es un aspecto más secundario, solventado sin embargo de una forma muy correcta -sobre todo teniendo en cuenta de que estamos hablando de un videojuego que viene del rol de mesa-.

Por otro lado, si la calidad gráfica de los personajes se puede hacer algo irregular, lo normal es que la del entorno sea igual. Pero aquí es donde llegamos a una de las grandes rarezas del juego. A pesar de que no es una calidad comparable a los Triple A ni mucho menos, el paisaje, vertical, es sombrío y hermoso a la vez; definición extraña que le va como anillo al dedo al juego en sí.

Anima: The Nameless Chronicles es un juego con una muy buena pinta. Esperamos ansiosos a poder probarlo por completo, ya que la historia narrada en la demo nos deja con la miel en los labios, y la rareza hermosa del entorno, así como la gran jugabilidad de la que hace gala, nos hace pensar que podemos esperar un buen juego, digno tanto de su predecesor como de los juegos de rol de mesa de la serie.