Guillemon't

Parece ser que Ubisoft no pasa por sus mejores momentos. Especialmente, cuando toca ponerlos en jaque en temas externos al mundo del videojuego. Hace poco comentábamos cómo Serge Hascoët aprovechaba su situación de alto poder para cancelar con suma potestad el lanzamiento de un título que ilusionaba a público y desarrolladores, a lo que se le sumaba su salida de la empresa por los presuntos acosos sexuales que habría podido llegar a cometer dentro de esta. No obstante, recientes noticias apuntan a que Hascoët no habría sido el único que hubiese hecho uso de su influencia para llevar a cabo esta clase de gravísimas infracciones; Ubisoft podría tener un gran problema interno en cuanto al acuso sexual, y es que nuevas acusaciones han salido a la luz. Esta situación comenzó a gestionarse a inicios del pasado mes de junio, cuando la empresa se puso manos a la obra para frenar una situación que en un inicio parecía nimia y controlada, comenzando con castigos disciplinarios contra Tommy François y Maxime Béland, dos vicepresidentes de Ubisoft. Un mes más tarde, hemos conocido que François ha dejado la compañía sin aparentes secuelas, al igual que lo hizo Hascoët. 

Según hemos podido conocer gracias a Business Wire, François ha dejado su puesto tras ser acusado por acoso sexual; el que fue uno de los creativos más veteranos realizando grandes aportaciones a sagas como Watch Dogs, Far Cry o Assassin´s Creed (y quien fuese mano derecha de Hascoët) ha tenido que decir adiós tras ver su nombre en el punto de mira por estos asuntos. Los nombres, sin embargo, no acaban aquí: la lista es larga, y es que Ashraf Ismail, exdirector del recién anunciado Assassins Creed Valhalla, también ha dejado la compañía en un clima de acusaciones, junto Yannis Mallat y Cécile Cornet. Tras tantos abandonos – y todos enfocados a un tema tan delicado como el acoso sexual -, los focos no han tardado en posicionarse hacia el departamento de Recursos Humanos, el que se ha visto tachado por haber podido estar ocultado estos casos para no ensuciar la imagen de Ubisoft. 

Yves Guillemot, CEO de la empresa y encargado de comunicar al personal la marcha de François, se ha puesto manos a la obra, y asegura que pondrá en marcha numerosos cambios estructurales en la cúpula de la marca: “Cada vez que nos enteramos de que se ha producido una mala conducta, tomamos decisiones realmente difíciles y nos aseguramos de que esas decisiones tengan un impacto claro y positivo, así que eso es muy importante (…). Ha quedado claro que ciertas personas traicionaron la confianza que deposité en ellos, y no estuvieron a la altura de los valores de Ubisoft. Nunca he comprometido mis valores y ética, y nunca lo haré” declaraba el propio Guillemot en la última reunión con los inversores.

Todo indica que Ubisoft esta teniendo un problema interno mucho más grave de lo que se esperaba, y estas nuevas acusaciones por acoso a una de las desarrolladoras más importantes de este sector podría repercutir de manera muy negativa en sus futuros proyectos. Es de esperar que en plena generación donde toda una comunidad rema en la misma dirección para poder poner fin tanto a los temas de desigualdad como a los relativos a abusos sexuales – que, por desgracia tan normalizados han estado durante décadas pasadas -, Ubisoft debe dar ejemplo y solucionar rápidamente este problema interno que en tal mal lugar le esta dejando; vigilar todos los casos que han salido a la luz, y, en caso de que haya alguno oculto que todavía desconozcamos, frenar esta situación cuanto antes. Que todos los responsables paguen por sus actos.